- La obra de la autora catalana busca la autenticidad en un mundo convulsionado
- Un diario emocional que trata la memoria, la identidad y la vulnerabilidad como formas de autodescubrimiento
Noviembre 2024,
Diástole, la nueva obra de Laura Cahís Sánchez, publicada por Letrame Grupo Editorial, es un viaje profundo hacia las emociones y la identidad. En su relato, la autora se enfrenta a los dilemas universales de la memoria, el autoconocimiento y la representación, convirtiendo su obra en un manifiesto en busca de una mayor conexión con la esencia humana. La obra no está fechada, sino que aparece estructurada como un diario que cubre los años y meses de su proceso de transformación personal.
Un viaje de metamorfosis
La autora de Diástole describe su obra como un viaje de metamorfosis. En ella, se exploran las transiciones psicoemocionales que las personas viven en la sociedad moderna, marcada por un capitalismo frenético y la sobreproducción de pensamientos y emociones. Laura Cahís Sánchez, una persona camaleónica, disidente y genderfluid, se ha sumergido en un proceso de autoconstrucción para reconocer y aceptar su Yo, desafiando las normas impuestas por la sociedad.
Mensaje sobre la vulnerabilidad y la colectivización
La obra es una reflexión sobre lo que significa ser vulnerable en una sociedad que no fomenta el sentimiento comunitario. Basándose en las ideas de Byung-Chul Han, quien menciona cómo la atomización de la sociedad afecta a la gestión de los sentimientos, Laura Cahís Sánchez utiliza su relato para hacernos reflexionar sobre la importancia de la vulnerabilidad como un valor colectivo, que debe ser compartido para evitar la deshumanización.
Cuestiona y expone la necesidad de ser escuchado
Diástole es un llamado a la representación y al reconocimiento. En un mundo digitalizado y acelerado, Laura nos cuestiona si realmente estamos escuchándonos los unos a los otros. Su obra se convierte en una forma de expresión sobre lo que sentimos y necesitamos como individuos. En su perspectiva, «necesitamos sentir lo que sentimos, necesitamos sentirnos representados de alguna manera», un mensaje crucial en tiempos de desconexión social.
El protagonista de Diástole
En este relato, los protagonistas no son personas individuales, sino las versiones de la propia autora, así como todas aquellas personas que han dejado huella en ella. Cada una de sus versiones ha sido vital para la construcción de la persona que es hoy, a pesar de que ya no habiten en su vida. Esta estructura fluida y cambiante permite que los lectores se identifiquen con las experiencias de transformación y crecimiento que la autora describe.
Una publicación que se convierte en un sueño
Para Laura Cahís Sánchez, la publicación de Diástole es una realización personal. Aunque no tiene grandes expectativas de ventas, su propósito con la obra era, ante todo, cumplir su sueño de ver sus pensamientos reflejados en un libro físico. Su obra no busca necesariamente una gran acogida comercial, sino un impacto emocional en aquellos que se adentren en sus páginas.
Opiniones
Las opiniones sobre Diástole han sido variadas, pero en su mayoría coinciden en que la obra es «removedora». Los lectores que han tenido la oportunidad de explorar el texto destacan cómo el libro invita a reflexionar sobre la identidad, la memoria y el proceso de autoconstrucción personal. La sensibilidad y la profundidad de la obra, junto con sus poderosas enseñanzas sobre vulnerabilidad y autocomprensión, han sido ampliamente apreciadas.
Un legado literario de autoaceptación y reflexión social
Diástole invita a los lectores a reflexionar sobre su propia existencia y a cuestionar las realidades construidas por la sociedad. En un mundo donde la voz del individuo a menudo queda ahogada por las presiones externas, esta obra se erige como un faro de autocomprensión y un llamado a la colectividad.
