Ibarra
Realizaba una carrera. Sus restos fueron encontrados en el sector de Mataje. El pasajero, un militar, no aparece.
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Consternación y dolor hay en los familiares de Martha Morocho Morocho, joven ibarreña de 26 años de edad que fue hallada sin vida en una quebrada de la provincia de Esmeraldas. Según la necropsia, el cuerpo evidencia signos de violencia, es decir, fue agredida.
En Caranqui, en el sur de Ibarra, la triste noticia tiene conmocionada a la familia y sobresaltados a los vecinos que piden justicia para que sea esclarecido este hecho.
Un menor de edad, hijo de la ahora occisa, queda en la orfandad, sin entender por qué le arrebataron a su madre.
Hay preocupación, además, porque se desconoce el paradero de un militar que fue el que contrató a la taxista. Hasta el momento no se ha reportado el uniformado.
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Martha Morocho ofrecía servicio de transporte en Ibarra. El pasado lunes, 6 de enero, un cliente frecuente le solicitó una carrera desde Ibarra hacia San Lorenzo, a las 17:00, novedad que informó a sus familiares, quienes jamás pensaron que iba a ser el último trabajo que realizaría y con un trágico final.
Luis, padre de la ahora occisa, contó que iba a trasladar a un hombre, quien se habría identificado como militar, presumiblemente en servicio activo.
Según los familiares de la chica, el hombre era usuario de los servicios de movilización que ofrecía ella.
Una sola vez se comunicaron hija y padre (19:20), luego no supo más de ella y tras no reportarse nuevamente su hija, Luis denunció el hecho a las autoridades locales.
Las indagaciones realizadas por la familia determinan que una cámara de videovigilancia ubicada frente a la terminal terrestre de Ibarra muestra imágenes en las que es vista en su vehículo de color negro.
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Allí habría cargado el automotor con gasolina para emprender el viaje sobre 177 km, unas tres horas aproximadamente. La reproducción de las imágenes evidencia que estaba acompañada de un pasajero.
Luis formalizó la denuncia en la Fiscalía de Ibarra. Y el pasado miércoles, 8 de enero, esa dependencia inició junto con la Policía Nacional las investigaciones bajo la figura legal de desaparición involuntaria.
Las fotografías de la joven y números de contacto de los familiares fueron publicados en diferentes redes sociales de Carchi, Imbabura y Esmeraldas, donde existía la presunción de que podría encontrase, algo que permitió avanzar en las indagaciones.
Según moradores del ramal de Calderón, en el ingreso a San Lorenzo, el auto fue visto en el redondel de entrada a San Lorenzo, no conociendo más datos sobre el paradero de la conductora y el ocupante.
Tras cinco días de búsqueda, con base en el localizador GPS fue encontrado el carro.
Fue identificado próximo a la línea de frontera con Colombia, en Mataje, hasta donde se desplazaron el padre y hermano de la víctima en busca de información. Lamentablemente se encontraron con la fatal noticia de que su familiar había sido asesinada.
La Dirección Nacional de Delitos contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestro (Dinased) realiza las investigaciones para determinar las circunstancias de la muerte e identificar a los responsables de este homicidio. (I)
El Universo
