El Black Friday es oficialmente este viernes 29 de noviembre en Estados Unidos, su país de origen, y en otros donde el comercio ha adoptado esta estrategia comercial, pero en Ecuador este día es visto como un ‘salvavidas’ y solo el inicio de un fin de semana en el que los negocios esperan recuperarse de un año entero de ventas a la baja, en medio de apagones, inseguridad y una situación económica adversa.
Según la Cámara de Comercio de Guayaquil, las ventas de un fin de semana normal son de $ 700 millones, con el Black Friday esperan llegar a $ 801 millones.
El Black Friday es oficialmente este viernes 29 de noviembre en Estados Unidos, su país de origen, y en otros donde el comercio ha adoptado esta estrategia comercial, pero en Ecuador este día es visto como un ‘salvavidas’ y solo el inicio de un fin de semana en el que los negocios esperan recuperarse de un año entero de ventas a la baja, en medio de apagones, inseguridad y una situación económica adversa.
Este día empezó con buenas señales para los comercios, muchos clientes incluso madrugaron afuera de locales de electrodomésticos atraídos por las ofertas y descuentos. Por ejemplo, en el de Marcimex de la avenida 9 de Octubre y García Avilés ya había clientes esperando desde antes de las 06:00 para poder llevarse uno de los televisores de 32 pulgadas que la marca estaba promocionando a solo $ 99, el local abrió sus puertas a las 07:20.
Los mismos compradores aseguraron que había más interés este año que en el 2023, por ejemplo, cuando también hubo una promoción similar. “Ya he comprado una cocina y una refrigeradora en el Black Friday de otros años, y sí veo más gente este año que el año pasado”, aseguró María Fernanda Armijos, quien esta vez llegó en busca del televisor. Luego de Marcimex, los otros locales de la zona, como Comandato, La Ganga, Artefacta, Crecos y Almacenes España, abrieron y también empezaron de a poco a recibir clientes.
En un local de venta de electrodomésticos las promociones y descuentos van desde el 30 % al 50 % y estarán vigentes todo el fin de semana, el sábado 30 de noviembre y el domingo 1 de diciembre. La meta es por lo menos llegar a $ 70.000 en ventas en los tres días. Las ventas en ese almacén en un fin de semana normal -viernes, sábado y domingo- son de $ 24.000 ($ 8.000 por día).
Miguel Ángel González, presidente de la Cámara de Comercio de Guayaquil (CCG), confirmó las expectativas del sector comercial para este fin de semana, por lo que cataloga que el Black Friday para el comercio local ahora es un Black Weekend, es decir, pasó de un día a una semana o en este caso un fin de semana de descuentos y promociones. “Esperamos que este Black Weekend le dé un gran impulso al comercio”, señaló.
A la vez calculó que durante este fin de semana, las ventas del comercio serían de $ 801 millones y comparó que en un fin de semana normal, las ventas suelen ser de $ 700 millones. Es decir, el Black Weekend incrementaría las ventas en 14 % respecto de fines de semana normales. “Por eso resaltamos la importancia del Black Friday, que se presenta como un salvavidas para los negocios que han sido golpeados por la coyuntura actual”, indicó González.
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Mientras este primer día de Black Friday avanzaba, otros locales recibían también gran cantidad de clientes. Por ejemplo, en el establecimiento de la avenida Carlos Julio Arosemena de Hipermercados Coral hubo largas filas desde la madrugada, pese a que el negocio inició su promoción del Black Friday con descuentos de hasta el 80 % desde el jueves 28 de noviembre, día en que también hubo colas para entrar a los locales de Guayaquil, Quito y Cuenca y gran aglomeración para alcanzar los productos con descuentos.
En el local mencionado las puertas de abrieron a las 08:40, lo que también provocó problemas de tránsito, pues las colas de vehículos que también esperaban para ingresar a los parqueaderos llegaban casi hasta la Universidad Católica. Ya dentro del local, la prioridad de la mayoría de clientes fueron los productos de primera necesidad, como el arroz, aceite, papel higiénico y el detergente, que estaban con descuentos de hasta el 50 % o con la promoción del 2×1 (pague uno y lleve dos).
Sin embargo, la cantidad que los clientes podían llevar de este tipo de productos era limitada y controlada en el sector de cajas por personal del hipermercado.
En centros comerciales el interés fue un poco más discreto. Cuando las puertas abrieron en el Mall del Norte, a las 10:00, unas 30 personas esperaban en uno de los ingresos. Según personal de seguridad del centro comercial, la afluencia de clientes creció por el Black Friday. “Normalmente en cada ingreso esperan unas cinco, máximo ocho personas. Esta alza es por el Black Friday”, dijo un custodio.
Dentro del centro comercial la atención de los primeros clientes se dividió entre los locales de ventas de electrodomésticos, ropa y el Megamaxi. Además, para atraer a más interesados las tiendas sacaron a los pasillos del centro comercial la mercadería con los descuentos. Según varios vendedores, es una política del establecimiento y ayuda a atraer a los clientes.
“Ha empezado un poco lento (las ventas), hay que ver en el transcurso del día, cuando ya la gente salga de los trabajos y el fin de semana”, dijo la vendedora de un local de ropa y zapatos. (I)
El Universo