Con total seguridad, el presidente Daniel Noboa afirmó el miércoles que “en diciembre ya se acabarán los apagones y volveremos a tener una vida normal”. La promesa ha generado diversos comentarios y expectativas, ya que el 23 de noviembre se cumplen dos meses desde que se iniciaron los prologados cortes de energía que han llegado a ser hasta de 14 horas al día. Y en este tiempo el Gobierno ha hecho algunos ofrecimientos que no se han cumplido, como reducir los racionamientos a cuatro horas diarias.
Cinco analistas en temas energéticos revisan las condiciones en las que se encuentra el país. El mandatario no dio una fecha estimada para concretar su ofrerta.
Con total seguridad, el presidente Daniel Noboa afirmó el miércoles que “en diciembre ya se acabarán los apagones y volveremos a tener una vida normal”. La promesa ha generado diversos comentarios y expectativas, ya que el 23 de noviembre se cumplen dos meses desde que se iniciaron los prologados cortes de energía que han llegado a ser hasta de 14 horas al día. Y en este tiempo el Gobierno ha hecho algunos ofrecimientos que no se han cumplido, como reducir los racionamientos a cuatro horas diarias.
Diciembre es el mes con mayor consumo de energía debido a las festividades de Navidad y fin de año. Históricamente la demanda de energía sube alrededor de 200 megavatios (MW) adicionales, según expertos.
El mandatario hizo el ofrecimiento luego que Colombia reactivó el domingo pasado la exportación de energía a Ecuador, enviando 440 megavatios (MW), lo que contribuyó a que los horarios de cortes de energía se reduzcan a ocho horas al día.
Además se prevé que entre el 29 de noviembre y el 3 de diciembre lleguen a Ecuador los 23 generadores de la empresa estadounidense Progen que serán instalados en Salitral y que aportarán 100 MW al Sistema Nacional Interconectado (SNI). Se proyecta que la instalación de los generadores esté lista a partir del 15 de diciembre. La compañía también tiene otro contrato para incorporar 50 MW en Quevedo.
Paralelamente, el Gobierno ha anunciado que a finales de diciembre comenzará a operar la primera de las tres turbinas de la Central Alluriquín, del proyecto hidroeléctrico Toachi Pilatón. Cada turbina tiene una capacidad de 68 MW, sumando entre las tres 204 MW que estarían operativas hasta febrero de 2024.
Por otro lado, según el presidente, Carondelet ha invertido más de $ 700 millones para reactivar el parque termoeléctrico y recuperar reparar lo que no se ha atendido desde el año 2020.
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A menos de diez días para que termine noviembre, y todavía con ausencia de lluvias que permitan recuperar el nivel del embalse de Mazar, la pregunta alrededor de las declaraciones de Noboa es si será posible o no que los apagones terminen en diciembre; y, si en efecto se acaban los apagones, en qué fecha sucederá, porque el mes tiene 31 días y el presidente no mencionó una fecha en la que su promesa se concretaría.
Para responder esa inquietud, EL UNIVERSO consultó a cinco expertos en materia eléctrica. Ninguno se atrevió a confirmar plenamente lo dicho por el mandatario.
Cuatro ven más probable que disminuyan los horarios de cortes de energía, antes que finalicen los racionamientos, ya que el déficit energético ronda los 1.700 MW. Otro considera que sí sería posible que los apagones terminen porque se esperan precipitaciones importantes para el último mes del año.
Gladys Pijal, ingeniera eléctrica; Marco Acuña, presidente del Colegio de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos de Pichincha; Diego Morales, presidente del Colegio de Ingenieros Eléctricos de Azuay; y Hugo Arcos, especialista en el sector energético, coinciden en que es poco probable que Ecuador vuelva a tener 24 horas de servicio de energía eléctrica en diciembre si no llueve de manera constante, no se cumple con la incorporación más generación de energía y no se reduce el nivel de demanda.
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Pijal recordó que hay antecedentes negativos en los ofrecimientos del Gobierno, porque no se han cumplido en su totalidad. Eso marca un precedente que genera dudas, resaltó. “No podemos confiarnos porque ya ha habido anuncios anteriores; por ejemplo, de los 341 MW que ofreció, solo 100 MW (de la barcaza turca) están funcionando”, indicó.
Acuña, por su parte, señaló que el déficit energético ha llegado a 1.800 MW debido a la intensa sequía y a que no se ha sumando más generación. En sentido, dijo que “es bastante difícil cumplir el ofrecimiento, a menos que haya lluvias importantes”. Añadió que “la cantidad de generación que se está incorporando no cubre el déficit de energía, tomando en cuenta los 450 MW que se está comprando a Colombia”.
Por su parte, Diego Morales agregó que será determinante la operatividad de 240 MW de energía térmica (por Salitral, Quevedo y Esmeraldas), así como el funcionamiento de la central Alluriquín y que los envíos de Colombia sean en la totalidad de la línea de transmisión. “Y que se establezca un plan nacional de eficiencia energética, para reducir el consumo en la hora pico, entre las 19:00 y 21:00, al menos unos 200 MW”, apuntó.
En criterio de Arcos, las lluvias son volátiles, por lo que no se puede esperar mucho de ese lado, sino más bien que se cumplan los plazos para que entre en operación más energía al SNI. “Si es que vamos a un aspecto netamente técnico, la posibilidad de disminuir los apagones se sustenta técnicamente, de forma exclusiva, en la incorporación cierta de generación”.
En cambio, Andrés Oquendo, expresidente del Colegio de Ingenieros Eléctricos, opinó que “sí es bastante probable que terminen los apagones en diciembre”, pero no por más generación de energía, sino porque llegarían precipitaciones al final del año, tomando en cuenta que Colombia experimenta lluvias diarias. “Más que por inversión, será por cuestiones climáticas”, argumentó y observó que, probablemente, el presidente Daniel Noboa hizo el anuncio con base en informes fiables del comportamiento climático.
En lo que concuerdan los cinco expertos es que en el hipotético caso de que todos los factores se cumplan favorablemente y a tiempo, los apagones podrían finalizar entre la tercera y cuarta semana de diciembre; antes de eso es imposible. (I)
El Universo