Un presunto caso de abuso sexual contra un menor de edad en una institución educativa de Carapungo, en el norte de Quito, ha generado la activación inmediata de protocolos de protección por parte del Ministerio de Educación y otras entidades competentes.
El Ministerio de Educación activó los protocolos de protección.
Un presunto caso de abuso sexual contra un menor de edad en una institución educativa de Carapungo, en el norte de Quito, ha generado la activación inmediata de protocolos de protección por parte del Ministerio de Educación y otras entidades competentes.
El caso se volvió público ante la denuncia de una madre que asegura que su hijo de 5 años habría sido víctima de una agresión sexual por parte de un compañero.
El subsecretario de Educación de Quito, Patricio Moreno, confirmó que el hecho presuntamente ocurrió el 16 de enero del 2025 y fue identificado por los padres de la víctima un día después, cuando notaron señales de malestar y lesiones físicas en el menor.
Tras llevarlo a una revisión médica, se emitió un certificado que confirmó la agresión sexual, por lo que los progenitores presentaron una denuncia formal ante las autoridades.
“Desde que se conoció la denuncia en el distrito educativo, se activaron medidas de protección tanto para la presunta víctima como para el presunto agresor, asegurando que no exista contacto entre ellos”, indicó Moreno.
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Entre las acciones tomadas, el ministerio facilitó el traslado de la víctima a otra institución educativa para garantizar su bienestar emocional y académico, además de brindarles acompañamiento psicoemocional a él y a su familia.
Por su parte, el presunto agresor ha sido apartado de la institución y actualmente recibe clases de manera virtual como parte de las medidas de protección establecidas.
Adicionalmente, se ha iniciado un proceso administrativo para esclarecer los hechos y determinar las sanciones o acciones pertinentes en conformidad con la normativa vigente.
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El Ministerio de Educación también ha mantenido reuniones con los representantes de la comunidad educativa para explicar el procedimiento que se sigue en casos de violencia en el ámbito escolar y atender otras preocupaciones expresadas por los padres de familia.
“Hemos escuchado sus denuncias y quejas respecto a lo que ocurre en la institución y estamos activando los procesos administrativos correspondientes”, afirmó Moreno.
La denuncia fue formalmente recibida por el distrito educativo el 20 de enero y se activaron todos los protocolos. La institución educativa pertenece al Distrito 2 de Quito, que abarca Carapungo, Carcelén, Llano Grande y Guayllabamba. (I)
El Universo