En un partido clave por la fecha 11 de la primera etapa de la LigaPro, Delfín y Orense igualaron sin goles este domingo en el Estadio Jocay de Manta, en un compromiso marcado por la imprecisión y la falta de contundencia ofensiva. El empate deja a ambos equipos con sabor amargo: los machaleños desperdiciaron la oportunidad de escalar al quinto puesto, mientras que los cetáceos no lograron salir del fondo de la tabla.
Primer tiempo: intensidad sin definición
Orense mostró mayor iniciativa ofensiva en los primeros minutos del compromiso. Al 19′, Bruno Caicedo desbordó por la banda derecha y lanzó un centro preciso que encontró a Bryan Viñán, quien cabeceó de palomita, pero su remate fue contenido por el arquero Bryan Heras, figura clave del local.
A pesar del dominio territorial de los visitantes, la falta de puntería y claridad en el último pase impidieron abrir el marcador. Delfín, por su parte, resistió bien en defensa e intentó responder con esporádicas salidas desde su mediocampo, aunque sin mayor peligro.
El partido entró en un tramo de poca movilidad y ritmo lento. Sin ideas claras en los metros finales, ambos equipos se enredaron en la mitad de la cancha. La única acción destacable para Delfín llegó al 33′, cuando Erick Mendoza probó con un disparo aislado que fue controlado sin dificultades por Rolando Silva, arquero de Orense.
Segundo tiempo: fricción, errores y una cancha en mal estado
La segunda mitad mantuvo el tono de la primera: mucho esfuerzo físico, disputas en el medio campo y constantes errores en los pases. La intensidad en la marca superó a la creatividad, y la pobre condición del terreno de juego tampoco favoreció el espectáculo. Varios baches en la cancha complicaron los controles y desvirtuaron la dirección de los pases, forzando a ambos equipos a abusar del pelotazo.
Aunque ambos técnicos buscaron soluciones desde el banquillo, los cambios no lograron alterar el desarrollo del juego. La falta de claridad ofensiva fue el denominador común, y el 0-0 terminó reflejando con justicia lo que ocurrió sobre el césped.
Un punto que no conforma
Con este empate, Orense suma 15 puntos y se mantiene en la pelea por la parte media de la tabla, mientras que Delfín llega a 7 unidades, aún anclado en la última posición, en una campaña muy por debajo de las expectativas.
LA NACIÓN
FOTO INTERNET
En un partido clave por la fecha 11 de la primera etapa de la LigaPro, Delfín y Orense igualaron sin goles este domingo en el Estadio Jocay de Manta, en un compromiso marcado por la imprecisión y la falta de contundencia ofensiva. El empate deja a ambos equipos con sabor amargo: los machaleños desperdiciaron la
En un partido clave por la fecha 11 de la primera etapa de la LigaPro, Delfín y Orense igualaron sin goles este domingo en el Estadio Jocay de Manta, en un compromiso marcado por la imprecisión y la falta de contundencia ofensiva. El empate deja a ambos equipos con sabor amargo: los machaleños desperdiciaron la oportunidad de escalar al quinto puesto, mientras que los cetáceos no lograron salir del fondo de la tabla.
Primer tiempo: intensidad sin definición
Orense mostró mayor iniciativa ofensiva en los primeros minutos del compromiso. Al 19′, Bruno Caicedo desbordó por la banda derecha y lanzó un centro preciso que encontró a Bryan Viñán, quien cabeceó de palomita, pero su remate fue contenido por el arquero Bryan Heras, figura clave del local.
A pesar del dominio territorial de los visitantes, la falta de puntería y claridad en el último pase impidieron abrir el marcador. Delfín, por su parte, resistió bien en defensa e intentó responder con esporádicas salidas desde su mediocampo, aunque sin mayor peligro.
El partido entró en un tramo de poca movilidad y ritmo lento. Sin ideas claras en los metros finales, ambos equipos se enredaron en la mitad de la cancha. La única acción destacable para Delfín llegó al 33′, cuando Erick Mendoza probó con un disparo aislado que fue controlado sin dificultades por Rolando Silva, arquero de Orense.
Segundo tiempo: fricción, errores y una cancha en mal estado
La segunda mitad mantuvo el tono de la primera: mucho esfuerzo físico, disputas en el medio campo y constantes errores en los pases. La intensidad en la marca superó a la creatividad, y la pobre condición del terreno de juego tampoco favoreció el espectáculo. Varios baches en la cancha complicaron los controles y desvirtuaron la dirección de los pases, forzando a ambos equipos a abusar del pelotazo.
Aunque ambos técnicos buscaron soluciones desde el banquillo, los cambios no lograron alterar el desarrollo del juego. La falta de claridad ofensiva fue el denominador común, y el 0-0 terminó reflejando con justicia lo que ocurrió sobre el césped.
Un punto que no conforma
Con este empate, Orense suma 15 puntos y se mantiene en la pelea por la parte media de la tabla, mientras que Delfín llega a 7 unidades, aún anclado en la última posición, en una campaña muy por debajo de las expectativas.
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Deportes – La Nación