En 1965, la Junta Militar del Gobierno compuesta por Ramón Castro Jijón, Luis Cabrera Sevilla y Guillermo Freile Posso fijó el 26 de noviembre como Día del Himno Nacional por conmemorarse el centenario de su creación. Es decir, por decreto la celebración del Día del Himno Nacional fue instituida para el 26 de noviembre de cada año.
En 2008, el Instituto de Patrimonio Cultural incluyó en la lista de patrimonios inmateriales de nuestra patria al Himno Nacional.
En 1965, la Junta Militar del Gobierno compuesta por Ramón Castro Jijón, Luis Cabrera Sevilla y Guillermo Freile Posso fijó el 26 de noviembre como Día del Himno Nacional por conmemorarse el centenario de su creación. Es decir, por decreto la celebración del Día del Himno Nacional fue instituida para el 26 de noviembre de cada año.
El establecimiento de la fiesta mayor de este símbolo ocurrió mientras el país celebraba el primer centenario de creación de los versos que lo forman y que son inspiración del poeta ambateño Juan León Mera Martínez, quien los escribiera una noche del memorable mes novembrino de 1865.
Antes de la letra de Juan León Mera (1832-1894) a la que puso música el maestro Antonio Neumane Marno (1818-1871), hubo textos llamados canciones nacionales e himnos creados por José Joaquín de Olmedo, Juan José Flores y otros personajes, pero que cayeron en el olvido o se les aconsejaron cambios y modificaciones. Igual ocurrió con la parte musical, que además de sufrir reparos de compositores y músicos presentó desacuerdos en la fecha exacta de su primera difusión a la comunidad.
La letra fue enviada al francés Antonio Neumane, quien vivía en Guayaquil, para que finalmente se entregara al Congreso que aprobó la música. Tras desacuerdos aún en la letra, el 29 de septiembre de 1948, el Congreso Nacional declaró el himno como oficial e intangible la composición de Mera.
En marzo de 1977, la Junta Militar, presidida por Alfredo Poveda, dispuso la supresión de varias estrofas para hacerlo menos extenso y de fácil interpretación para los ciudadanos. Es por esto que solo se canta el coro y la primera estrofa.
En 2001 se publicó en el Registro Oficial la resolución del Congreso que declaraba la oficialidad e intangibilidad de la música y letra del himno, con la tonalidad de mi mayor en la introducción, el coro, la estrofa y el coro.
En 2008, el Instituto de Patrimonio Cultural incluyó en la lista de patrimonios inmateriales de nuestra patria al Himno Nacional.
Letra completa del himno nacional
CORO
¡Salve oh Patria, mil veces! ¡Oh Patria!
Gloria a ti! Ya tu pecho rebosa
gozo y paz y tu frente radiosa
más que el sol contemplamos lucir.
Primera estrofa
Indignados tus hijos del yugo
que le impuso la ibérica audacia,
de la injusta y horrenda desgracia
que pesaba fatal sobre ti,
santa voz a los cielos alzaron,
voz de noble y sin par juramento,
de vengarte del monstruo sangriento,
de romper este yugo servil.
[Coro]
Segunda estrofa
Los primeros los hijos del suelo
que soberbio el Pichincha decora
te aclamaron por siempre señora
y vertieron su sangre por ti.
Dios miró y aceptó el holocausto,
y esa sangre fue germen fecundo
de otros héroes que, atónito, el mundo
vio en tu torno a millares surgir.
[Coro]
Tercera estrofa
De estos héroes al brazo de hierro
nada tuvo invencible la tierra,
y del valle a la altísima sierra
se escuchaba el fragor de la lid; tras la lid la victoria volaba,
libertad tras el triunfo venía,
y al león destrozado se oía
de impotencia y despecho rugir.
[Coro]
Cuarta estrofa
Cedió al fin la fiereza española,
y hoy, oh Patria, tu libre existencia
es la noble y magnífica herencia
que nos dio, el heroísmo feliz:
de las manos paternas la hubimos,
nadie intente arrancárnosla ahora,
ni nuestra ira excitar vengadora
quiera, necio o audaz, contra sí.
[Coro]
Quinta estrofa
Nadie, oh patria, lo intente. Las sombras
de tus héroes gloriosos nos miran,
y el valor y el orgullo que inspiran
son augurios de triunfo por ti.
Venga el hierro y el plomo fulmíneo,
que a la idea de la guerra y venganza
se despierte la heroica pujanza
que hizo al fiero español sucumbir.
[Coro]
Sexta estrofa
Y si nuevas cadenas prepara
la injusticia de bárbara suerte
¡gran Pichincha! prevén tu la muerte
de la Patria y sus hijos al fin;
hunde al punto en tus hondas entrañas
cuanto existe en tu tierra: el tirano
huelle sólo cenizas, y en vano
busque rastro de ser junto a ti. (I)
El Universo